Florece - Chatibuky

La miraba florecer y la envidiada. Aquella flor era sana, fuerte, con un color rojizo que no temblaba ante nada ni ante nadie. Perfecto contraste de complementarios entre sus tallos verdes y su flor joven, hermosa. Lo que ella no sabía es que la nube negra que había encima de su cabeza y que la seguía allá donde fuera, estaba llena de agua y le había hecho crecer muchas hojas... Algunas de ellas oscuras, sí, pero otras claras, todas diferentes y hojas al fin y al cabo. Unas eran más débiles, otras más fuertes, pero todas juntas la conformaban a ella. Le daban una historia que contar. Y aunque aquel color rojo era increíble, tenía que aprender que a veces el color se encuentra en sitios donde no se puede ver a simple vista. Guardado en un extraño rincón donde solo unos cuantos ojos bien limpios son capaces de verlo.